Esta tarde se enfrenta Zapatero a su segundo debate de investidura. Para demostrar su independencia e intentar comenzar a ganar terreno entre aquellos que consideraron el día 9 que el PP era mejor opción frente al poder de los nacionalistas, va a ser elegido en segunda vuelta y por mayoría simple.
Una vez acabada mañana la primera sesión del nuevo Congreso, Zapatero debe formar gobierno y tendrá entre sus manos la ocasión de reparar errores:
Error 1: Magdalena Álvarez: debe dejar el cargo y dejar la política, su actuación prepotente y la sucesión de desastres en su gestión la incapacitan incluso para un cargo menor. Los ciudadanos ya han tenido que sufrir suficientemente con ella y debe irse a casa
Error 2 y más grave: Mariano Fernández Bermejo, ensalzado por los medios afines desde su proclamación como fiscal progresista y cabal, nos hartamos de ver sus fotos de joven rockero y su banda para darle un perfil humano al nuevo ministro. Posteriormente le vimos en el Congreso en actitud de niñato estúpido y macarra de bar, el homologo natural de Pujalte en la otra bancada.
64 días más tarde, hoy los funcionarios de justicia que dependen de este tipo, han vuelto al trabajo. Tras ser tratados con desprecio y chulería durante 64 días por su ministro, incapaz, al parecer, de entender que es injusto que dos personas en el mismo país cobren sueldos diferentes por hacer el mismo trabajo.
Para culminar la huelga se nos ofrece de nuevo en la prensa afín un perfil conciliador y se pone la prueba de la culpa en manos de los sindicatos. Sibilino y serpenteante el ministro se agarra a una silla de la que el futuro presidente debe echarlo a patadas.
A Pujalte lo han arrinconado en su partido, que sea lo mismo con Bermejo.
Paro aquí con los errores pero seguiré mañana…..
Una vez acabada mañana la primera sesión del nuevo Congreso, Zapatero debe formar gobierno y tendrá entre sus manos la ocasión de reparar errores:
Error 1: Magdalena Álvarez: debe dejar el cargo y dejar la política, su actuación prepotente y la sucesión de desastres en su gestión la incapacitan incluso para un cargo menor. Los ciudadanos ya han tenido que sufrir suficientemente con ella y debe irse a casa
Error 2 y más grave: Mariano Fernández Bermejo, ensalzado por los medios afines desde su proclamación como fiscal progresista y cabal, nos hartamos de ver sus fotos de joven rockero y su banda para darle un perfil humano al nuevo ministro. Posteriormente le vimos en el Congreso en actitud de niñato estúpido y macarra de bar, el homologo natural de Pujalte en la otra bancada.
64 días más tarde, hoy los funcionarios de justicia que dependen de este tipo, han vuelto al trabajo. Tras ser tratados con desprecio y chulería durante 64 días por su ministro, incapaz, al parecer, de entender que es injusto que dos personas en el mismo país cobren sueldos diferentes por hacer el mismo trabajo.
Para culminar la huelga se nos ofrece de nuevo en la prensa afín un perfil conciliador y se pone la prueba de la culpa en manos de los sindicatos. Sibilino y serpenteante el ministro se agarra a una silla de la que el futuro presidente debe echarlo a patadas.
A Pujalte lo han arrinconado en su partido, que sea lo mismo con Bermejo.
Paro aquí con los errores pero seguiré mañana…..
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